San Francisco De Macorís.- Una mujer mató a puñaladas a su pareja sentimental, en un hecho ocurrido en horas de la madrugada en el sector Getsemaní de esta ciudad.
El occiso respondía al nombre de Jorge Rodríguez, de 35 años de edad, mientras que la agresora fue identificada como Lisbeth Jiménez García, de 26 años.
Al cuestionársela, Jiménez García dijo no estar arrepentida del hecho, ya que recibía maltratos de manera constantes por parte del fallecido.
Según el informe preliminar, el hecho ocurrió en medio de una acalorada discusión.
Una hermana de la detenida alega que la misma tiene problemas de salud mental, por lo que, pidió tomar esto en consideración.
El cuerpo sin vida se encuentra en la morgue del hospital San Vicente de Paúl y la prevenida en el Comando Regional Noreste de la Policía.
Otra mujer mata a su pareja en SFM
Este hecho se suma a otro, ocurrido la noche del sábado 31 de mayo, en el sector San Martín, San Francisco de Macorís.
La mujer, solo identificada como Natalia, le quitó la vida a su pareja, Anderson Ortiz Ávalo, de 32 años. Esto, tras una discusión motivada, según sus propias palabras, por los celos.
El trágico hecho ocurrió en la vivienda que ambos compartían junto a sus dos hijos. De acuerdo con versiones de vecinos, la pareja aparentaba mantener una relación estable. “Ellos se llevaban muy bien, siempre juntos, parecía una familia normal”, expresó una residente del sector visiblemente sorprendida por lo ocurrido.
Sin embargo, tras un altercado de carácter sentimental, Natalia habría tomado un cuchillo y le propinó varias estocadas a Ortiz Ávalo. La misma le ocacionó heridas mortales en distintas partes del cuerpo. La víctima fue trasladada de emergencia al Hospital San Vicente de Paúl, donde falleció mientras recibía atenciones médicas.
Fuentes cercanas al caso revelaron que, al momento de su detención, la mujer declaró a las autoridades: “Los celos me empujaron a hacerlo, no hay vuelta atrás”, una afirmación que ha causado consternación entre los residentes del sector.
Natalia se encuentra bajo custodia de la Policía Nacional y se le remitirá al Ministerio Público para los fines legales correspondientes. Las autoridades han iniciado una investigación formal con el objetivo de esclarecer todos los detalles del crimen.
Este lamentable suceso se suma a los múltiples episodios de violencia doméstica que afectan a cientos de familias en la República Dominicana, dejando en esta ocasión a dos menores en la orfandad y a una comunidad sumida en el dolor.
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